martes, 27 de noviembre de 2012
sábado, 3 de noviembre de 2012
En el día uno y el día dos no ocurre nada mas que seguir el camino; para el caminante solitario es extraño cuando se encuentra repentinamente en un día de esos donde el corazón se siente latir de furia, de impotencia, de soledad. Donde las
ilusiones desaparecen y dejan la realidad frente al él, como el ser que no la busca. Un día sintiendo
el desamor, un día inevitable. Un dia verdaderamente solo, un día sin caminos, un sin sentido... un día tres. Bran
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